En estos tiempos difíciles, llenos de frustraciones y decepciones y esfumados los ideales que acompañaron en las luchas a nuestros padres y madres, he aquí mi humilde alegato a la resistencia. No hay recetas.Esto es sólo una propuesta de algunas herramientas, o armas que disponemos:
VITALIDAD para seguir creciendo y para seguir conociendo, para construir relaciones. Saber que puedes cambiar de vida, de amigos, de charco, de casa, de novio, de cara, de tetas, de libro, de botas, de estilo, de pelo.
FRATERNIDAD. La solidaridad, el intercambio, los cuidados, el amor a los demás y a ti misma. El valor de las redes y del aprendizaje con los demás. UBUNTU o «yo soy porque nosotros somos»
CREATIVIDAD para buscar nuevos caminos, para no aburrirnos, para no dar por hecho maneras de pensar, sentir y expresar. Saber que podemos aprender continuamente, sin expectativas, sin miedo a nuestras capacidades.Por el simple placer de aprender , investigar y experimentar. Para compartir, para pasarlo bien
REFLEXIVIDAD. Conocer que es posible-y necesario-revisar y cuestionar nuestros preceptos y lugares comunes, en compañía y sin miedo a cambiar de opinión.
Porque la realidad se transforma y se construye día día, cada día.
Diáspora es un palabra áspera, dura, de esas que una vez las escuchas se te quedan grabadas a fuego, porque va irremediablemente asociada a exilio, emigración y desarraigo .
La diáspora está tomando nuevos carices en los tiempos que corren. En España la juventud Joven Aunque Sobradamente Preparada es la nueva cara de la diáspora y casi se nos olvidan el resto de emigrados. La presencia en los medios de esa juventud emigrada es cada vez más frecuente. Esta visibilidad es importante pero también conforma ciertas representaciones acerca de la juventud y de la diáspora que tienen unos efectos ideológicos.
Son representaciones edulcoradas e idealizadas de jóvenes profesionales que han conseguido alcanzar un nivel económico y un estatus social (poder simbólico), personas valientes y luchadoras, felices. Como Idoia, en Oslo que salió en el tristemente famoso capítulo Españoles en el mundo.
Siguiendo las estrategias propias de la representación, una porción de la diáspora (la triunfadora) se erige cono reflejo de la realidad, reflejo de todos los emigrados. Es la parte por el todo. Como toda representación, deja fuera del foco aquellas realidades que no interesa hacer visibles. No cuentan las historias de soledad y frustración, de gente que sufre, llora, es humillada y se siente sin lugar. No abundan detalles acerca de las causas y realidades que han hecho que determinadas personas se vean obligadas a transitar por otros lugares, transitar física y emocionalmente.
El peligro de estas representaciones, a mi modo de ver, radica no sólo en el conocido efecto llamada y la fuga de cerebros-que son también recursos e inversiones públicas que otros países aprovecharán- sino también en que esas representaciones desvían la atención de las condiciones y dimensiones causantes del exilio y trasladan la responabilidad NO a los causantes de esa situación sino a quienes no encontramos situaciones adecuadas en nuestros lugares para el desarrollo personal, profesional y emocional. Ya se empieza a escuchar eso de Vuestra generación es muy acomodada, ¡no sois emprendedores ni aventureros!, Solo aspiráis al funcionariado o ¡Dejad de lloriquear!
De momento, como estamos en víspera de esas fiestas taaaan familiares, un vistazo a esa marca de turrones que ha hecho de sus anuncios navideños un clásico de la cultura popular.
Ya en los 80 Pink Floyd retrataban así su percepción de la escuela: la relación de poder que puede establecerse entre quien enseña y quien es enseñado en una escuela autoritaria, la homogeinización de los alumnos y la poca atención a los intereses, contextos y referentes de los jóvenes. En definitiva, nos hablaban de una escuela sustentadora del orden social y limitadora de la libertad, creatividad y aprendizaje de los alumnos y de la necesidad de resistencia.
La relación con la escuela de Antoine Doinel en » Los cuatrocientos golpes» ( 1959), que será también la de Truffaut, es otro ejemplo de la relación de muchos jóvenes con el sistema educativo.
Pudieran parecernos éstos, retratos exagerados, demasiado dramáticos y poco realistas, vestigios del pasado. Y sin embargo veintitantos años después, aparece en los informativos una encantadora niña que afirmaba que su sueño era volar por los aires su escuela.
Y es que algo esta pasando dentro de las aulas; algo está pasando en la relación de los jóvenes con los lugares de aprender.
Y mientras tanto, la escuela ha perdido su lugar de referencia, su prestigio y su capacidad de generar alternativas. Se ha quedado anclada en el pasado, impotente ante su instrumentalización por parte de la clase política, que decide a menudo, qué es lo que hay que enseñar y aprender, cuándo se es lo suficientemente maduro para tal o cual conocimiento y qué no debe ser enseñado.
Hace tiempo que la necesidad de cambio en la escuela se escucha en diferentes territorios y es una voz que va aunando adeptos. Y efectivamente, el cambio está llegando pero, amparado en la crisis economica, recortes y retrocesos varios, no es el cambio que esperábamos.
Mientras tanto, sin perder la esperanza, un homenaje a todos los Antoine Doinel….
Siempre me ha costado mostrarme y exponerme y no considero que se me de demasiado bien escribir desde lo personal. Siempre me he sentido más cómoda en discursos más académicos, más políticos o más gamberros. Una forma de ocultarme supongo.
Además consideraba los blogs como una plataforma más para el egocentrismo.
Pero llegó la crisis. No, esa tan manida no, la otra, con minúsculas; de pareja, de trabajo, de futuro, de feminidad sin hijos, de los treinta… y entonces me he decidido: “Crearé un blog personal. Como ejercicio de estilo y de expresión, de relación con el mundo”.
Relación con el mundo es relación con personas, con culturas, con textos, con historias, con discursos, con vivencias, con pensamientos, con imágenes y lugares. Relación no como espectadora distante sino desde el centro, desde mi.
Y aquí estamos.
Como ya he dicho, me cuesta, así que irá poco a poco.De momento con un pseudo anonimato. Luego ya veremos.